Por mi conocida inclinación a la polémica no puedo dejar de continuar con éste tema que no deja de inquietarme.
Y como tampoco me gusta quedarme en la superficie de las cosas, he tratado de profundizar algo en el tema lo que además de inquieto me deja sorprendido.
En relación al artículo de El pais, diría, por ser cortes, que no acabo de entender su intencionalidad, pero la intuyo. Y creo que la periodista (Isabel Ferrer, corresponsal de El pais en Holanda se ha metido en un terreno farragoso sin saber muy bien como.
Por ejemplo cuando reproduce la siguiente declaración:
La situación española presenta un concepto casi opuesto del embarazo. "El control gestacional y obstétrico es muy bueno, y los prematuros y grandes prematuros son atendidos en unidades neonatales que figuran entre las mejores de Europa. Se sacan adelante a niños de 400 gramos con el apoyo de los padres, que los llevan pegados al cuerpo como marsupiales, y de los bancos de leche materna. Es un servicio caro, cierto, pero la sanidad pública no puede someterse a conceptos de rentabilidad", señala el ginecólogo Bernabé Hurtado de Mendoza, del Instituto Ginecológico La Cigüeña, de Madrid.
Se agradece la atucomplacencia pero cuando llegamos a los bancos de leche y los marsupiales me parece que alguien no tiene los pies sobre la tierra.
El doctor Bernabé Hurtado de Mendoza, que según reportaje de El pais de 17/02/2005 tiene dos tablas flamencas del siglo XVII en su despacho, amante de las nuevas tecnologías, filántropo y dedicado profesionalmente a la fertilidad y la reproducción asistida me merece el mayor de los respetos. Pero su autoridad como analista de la atención al parto en la sanidad pública me parece, cuando menos, cuestionable.
El coctel que se acaba realizando con los bancos de leche, los marsupiales, los partos en casa y la sin igual sanidad española resulta de lo menos apetitoso. Lo que no se es por encargo de quién se hizo.
Dejando aparte el tema mediático y pasando a cosas mas concretas, me ha llamado la atención los datos comparativos de Holanda con respecto al resto de paises europeos de los que hay datos (ver documento adjunto: Health statistics 1970 - 2001). Por ejemplo, la mortalidad neonatal permanece sensiblemente superior a la media durante todo el periodo, tal y como ocurre en la actualidad. La progresiva disminución de las tasas se produce con una progresión similar al resto.
Por tanto la hipótesis de la relación entre el parto domiciliario y las tasas de mortalidad neonatal no se mantiene. Parece que el modelo ha conseguido mantener la progresión a la baja (al igual que otros) pero no igualar o mejorar sus resultados con respecto a la media.
En definitiva, a sus autoridades sanitarias les corresponde dar respuesta a esta cuestión. Pero dejémonos de extrapolaciones fáciles.
Por cierto, si alguna matrona tiene la oportunidad de averiguar que opinan sus compañeras/os en el citado país sobre éste asunto le agradecería que nos lo contara. Lo he intentado en internet, pero el holandes no es mi fuerte.