Sería útil tener en cuenta que cuando nace un bebé, también nacen unos padres y una familia y este hecho es indisoluble. El profesional idóneo para valorar el estado de salud físico y mental de la diada madre-bebé en los primeros días tras el nacimiento es la matrona y el lugar idóneo para hacer esta valoración es el domicilio familiar. Hará como unos 10 años se potenció en Andalucía la Visita Puerperal Domiciliaria, pero actualmente ha quedado en el olvido por falta de personal y de voluntades. Se está potenciando mucho la atención a los procesos crónicos del envejecimiento a costa de otros procesos de salud más económicos, como la maternidad. No creo que esta sea una política idónea que ayude a fomentar la natalidad. En Valencia y Cataluña existe la figura de la Matrona de Enlace que garantiza el seguimiento de recién nacidos y madres que son dados de alta hospitalaria con algún riesgo. En Andalucía parece que no queremos tomar conciencia de las repercusiones que está teniendo en la salud de las mujeres y los bebés la carencia actual que existe de matronas en los Centros de Salud de la mayoría de provincias andaluzas. Si el SAS analizara en profundidad el ahorro de costes y las repercusiones en la salud que supone tener profesionales cualificados que apoyen a las madres en sus lactancias, maternidades y vidas reproductivas apostaría de manera decicida por incluir a la matrona como responsable de los programas de Salud de las mujeres y los recién nacidos. La idea de concertar la cita previamente desde el Hospital con la Matrona de referencia es la más coherente que corresponde con la evidencia y recomendaciones sanitarias, y detectaría alteraciones en riesgo de la salud tanto de la madre como del bebé y derívaría a los profesionales pertinentes. ¿Quien valora actualmente el estado físico y emocional de la madre en los primeros días tras el nacimiento tras el alta hospitalaria? ¿Cuantas lactancias están fracasando diariamente por falta de apoyo real y efectivo? Esa es la cuestión.