La verdad es que me sorprende la noticia. No entiendo como afirman fomentar el método canguro cuando la accesibilidad de los padres a los bebés ingresados está estrictamente restringida y se limita a visitas cada tres horas durante el día y sepación total durante la noche... Sólo la separación madre-hijo ya es todo un hándicap para la lactancia, pero la inexistencia de alternativas a las tetinas hacen muy complicado el conseguir amamantar a un bebé que ha de estar ingresado en esta unidad. Aparte de facilitarles el uso del lactario, considero que el personal de esa unidad habría de estar formado en el uso de sistemas como el finger-feeding, el vasito o el relactador, y así poder evitar en la medida de lo posible la confusión tetina-pezón. Un saludo, Inma