La tasa de cesáreas practicadas por Osakidetza el pasado año se elevó al 12,5%, inferior al 15% que la Organización Mundial de la Salud (OMS) propone no superar, y mucho menor que el porcentaje que arroja la media nacional. En total, la Sanidad Pública vasca atendió en 2007 un total de 18.134 partos, un 88% del total de los registrados en la CAV, según datos ofrecidos por el consejero vasco de Sanidad, Gabriel Inclán.

El responsable vasco de Sanidad, que inauguró las Jornadas sobre la atención al parto y al nacimiento en el siglo XXI, se refirió a los esfuerzos del Ejecutivo en esta materia y adelantó que Osakidetza pretende promover «el protagonismo y la corresponsabilidad de las mujeres» en el proceso de su propio parto. El consejero se refirió al reto de «combinar sabiamente el respeto a la fisiología del parto, con la intervención apropiada si el proceso se separa de la normalidad».

Inclán se mostró satisfecho por la atención de los partos en el sistema sanitario público vasco, que arroja «unos extraordinarios indicadores en términos de morbimortalidad materna y perinatal, equivalentes a los mejores del mundo, junto con unos indicadores de atención obstétrica realmente excepcionales».

También sumó al esfuerzo «que se está realizando por racionalizar el uso de la cesárea» la atención al parto «en presentación podálica», que ha permitido que los partos con presentación de nalgas sean vaginales en el 31% de los casos en el Hospital de Cruces.

Para Inclán, otro indicador «reseñable» de la calidad de la atención es el número de episiotomías en partos no instrumentales, que «sólo debe realizarse cuando es estrictamente necesaria». Los hospitales de Osakidetza que atienden partos se mantienen por debajo de la recomendación del 30% y, en concreto, el hospital de Mendaro en 2007 sólo realizó un 18 % en partos normales mientras el de Alto Deba efectuó un 17,25 %.